Por fin ha llegado el día en que
nuestros ogros se han visto las caras con Lord Farquaad, y esto supone dos
cosas. La primera y principal es que hemos recorrido nuestro camino y hemos
podido transmitirle nuestro pesar. Sin embargo nos ha lanzado una contraofensiva:
a cambio de nuestros terrenos nos ofrecía la belleza eterna, la fuente de la
eterna juventud. Pero claro, después de tantos días de convivencia nuestros
ogros han reflexionado. Han vivido mucho junto, han pasado momentos tan buenos
y sobre todo han aprendido tanto de aquellos que les rodean, que se han dado
cuenta que hay muchas cosas más importantes que la apariencia física. Así que
le han dado un golpe en las narices al rey, y se han marchado igual de verdes y
ogriles de su entrevista con Su Alteza, pero sabiendo que todo lo vivido en
estos días les ha hecho cambiar lo más importante, su interior.
Y por otro lado, la segunda de
las cosas que supone haber llegado hasta esta entrevista con Lord Farquaad es
que las colonias, inevitablemente, están llegando a su fin. Mañana pues será
día de celebraciones. Por todo lo acontecido en estos días pero especialmente
por la decisión que han tomado nuestros pequeños ogros.
Hola,
ResponderEliminarMira que me gusta estar con mis ogras, y eso que a veces se portan como auténticas ogras entre ellas (y no de cuento), pero para mí es más importante que lo pasen bien y entre lo que veo, lo que leo, lo que hacen y lo que cuentan luego estoy más que seguro que es el mejor sitio donde pueden estar, y en la mejor compañía. Enhorabuena a todos por el campamento y os daremos una "más que cálida" acogida. Salu2
Muchas gracias, por los comentarios durante estos días que nos hace mucha ilusión leer y sobre todo por las palabras tan bonitas que nos dedicas. Nosotros, los que llevamos mucho tiempo viniendo por aquí, creemos como tú que no hay mejor sitio donde ir de campamento e intentamos estar a la altura de vuestros chavales (en tu caso tus dos ogras, a cual más encantadora). Nos quedan sólo unas horas de estar por aquí y esperamos que todo termine genial y al año que viene tengan las mismas ganas de pasar doce días por estas tierras.
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